Día 1 - Phuket
Phuket es la isla más grande del país y se encuentra en el
sur. Es un destino común entre turistas, ya que sirve de puente para llegar a
otros lugares del sur. La ciudad no ofrece gran cosa, ya que la atracción
principal son las playas. Estas se
encuentran bastante alejadas de la ciudad de Phuket, por lo que conviene elegir
alguna de las playas (Kamala beach, Surin, Bang Tao, etc) y alojarse allí
mismo.
En nuestro caso cometimos el error de dormir en Phuket town,
lo que nos dificultó bastante nuestra excursión a la playa, dado que Phuket no
dispone de taxis propiamente dichos. Esto significa que se paga el triple para
que un particular te lleve a la playa a pasar el día.
No tuvimos la oportunidad de ver las famosas playas de
Phuket por falta de tiempo y decidimos visitar la más cercana a nuestro
alojamiento, la playa de Patong. Puede que no sea la más larga, bonita, ni
surfera, pero aún así la primera impresión fue ALUCINANTE! Arena blanca,
chiringuitos, agua color turquesa y selva de fondo… Para nosotros era el
paraíso!
Comimos en un “chiringuito” con unas vistas de película y
cuando llegó el momento de echar una buena carrera hasta el agua, empezó a
llover fuertemente. No nos importó mucho dado que seguía haciendo calor y la
gente, acostumbrada a los monzones de la época, seguían con lo suyo sin darle
importancia.
Dimos un largo paseo por la orilla desconectando del mundo,
mientras disfrutábamos de la tranquilidad de aquella playa.
Por la tarde nos adentramos en la zona de marcha de Patong.
La calle principal estaba repleta de pubs y bares que ofrecían todo tipo de
espectáculos de go-go, bailes privados, danza con fuego, conciertos, etc
Había muchísima gente por todas partes, turistas
desorientados, drag-queens, locales repartiendo flyers con chicas desnudas,
vendedores ambulantes… Aquello era un caos digno de ver. Lo que más destacaba era lo liberal que era Pucket en el tema de la homosexualidad y el travestismo, algo que no se puede ver en otras partes del país.
Nuestra noche terminó en un bar chill-out cercano a la playa con un mojito tailandés y un camarero muy majo que intentaba ligarse a Oliver.
Día 2 - Ko Phi Phi
Phi Phi son las islas mas famosas y turísticas de Tailandia.
Ko Phi Phi Don es la más grande de las dos y a la que suelen llegar los barcos
desde Phuket. El ferry dura aproximadamente 2h y si iba tan lleno de gente en
temporada baja, compadezco a los que lo cojan en la alta temporada turística.
Hay varios barcos por la mañana para ir y otros por la tarde para volver a
Phuket.
Nosotros íbamos con la idea de alojarnos allí un par de
noches para tener suficiente tiempo de ver
todas las playas y conocer la isla. Dormir allí no es un problema ya que
todo lo que hay en Ko Phi Phi Don son hoteles y comercios. Hay mucha variedad de alojamiento empezando
por muy económico, siempre que se reserve con antelación y terminando por
apartamentos grandiosos con calas privadas. En el mismo puerto, suelen
esperarte los empleados del hotel/pensión para llevarte en una lancha hasta la
entrada del mismo.
A nosotros nos dio la bienvenida un tailandés del hotel ,
además de una gran tormenta. A pesar del tiempo, el paisaje era precioso. El
color del agua y las montañas no parecía real… Al llegar a nuestra cabaña en lo
alto de un monte, quedamos encantados con las vistas, pese a que estábamos algo
alejados del pueblo.
Dejamos las cosas lo más rápido que pudimos y despues de comer nos fuimos a visitar el pueblo y la playa más cercana. Nos
encantaron las callecitas estrechas llenas de puestos de comida y gente
en bicicleta. Todo era muy turístico, pero a la vez no perdía su esencia de pueblo. A mí personalmente me enamoró ver tal cantidad de gatitos que vivían en la isla.
Por fin había salido el sol y estabamos en una maravillosa playa. El agua estaba cristalina y muy caliente! Además no había mucha gente y pudimos tomar el sol y disfrutar del día tranquilamente.
Tan solo en dos-tres horas la marea bajó lo suficiente como para dejar en tierra los barcos y las boyas. Fue algo sorprendente.. La gente paseaba por lo que hace un rato había sido el fondo marino! Al atardecer, de camino al hotel, pude hacer unas fotos espectaculares!
Día 3 - Ko Phi Phi
Nos despertamos pronto para desayunar y dar un paseo por una calita cercana al hotel. Estaba muy despejada y el agua llamaba para darse un chapuzón. Despues de hacernos fotos y bañarnos allí tan inocentemente, nos dieron la noticia de que aquel era el punto más frecuentado por tiburones, al que llevaban a muchos turistas para mostrarselos...
Despues de comer nos esperaba un tour en barco, muy práctico para conocer todas las playas de Ko Phi Phi en una tarde por un precio interesante (15e por persona) El tour ofrecía la visita a la playa de los monos, la cueva de los vikingos, Maya Bay, famosa por el rodaje de la pelicula "La playa", y algunas playas más de la isla Phi Phi Leh. Además se incluían las actividades de kayak y buceo, la comida y vistas al atardecer a la vuelta.
En el pueblo hicimos la reserva en una de las mil agencias que hay y más tarde, nos recogió el que iba a ser nuestro guía, para llevarnos hasta el barco. Todo empezaba de maravilla: sol radiante, música reggae y muchas risas entre gente de todas las partes del mundo.
En el pueblo hicimos la reserva en una de las mil agencias que hay y más tarde, nos recogió el que iba a ser nuestro guía, para llevarnos hasta el barco. Todo empezaba de maravilla: sol radiante, música reggae y muchas risas entre gente de todas las partes del mundo.
Pero el tiempo nos estropeó los planes. Empezó a nublarse y rápidamente lo que era el mar tranquilo y radiante, se convirtió en un paisaje digno de una pelicula de miedo. La lluvia y el viento desestabilizaron el barco, obligandolo a parar y hacer tiempo hasta que todo se calmara. De repente hacía mucho frío y nos vimos escondidos en el interior del barco junto a otros turistas asustados.
Al cabo de un rato, la lluvia había cesado, aunque seguía haciendo frío. El lugar donde nos encontrabamos en ese momento era impresionante, asique nos atrevimos a saltar al agua y empezar con las actividades de buceo y kayak antes de que nos lloviera otra vez. La experiencia fue increíble. Pese a los numerosos barcos y turistas, había miles de peces que no temían acercarse y nadar junto a ti.
Más tarde el barco nos llevó a Maya Bay, la playa donde en su momento estuvo Leonardo Di Caprio para rodar la película "La playa", además este lugar ha cogido fama por la cantidad de anuncios y spot que se han rodado en él. Aquí tampoco tuvimos suerte, ya que el mar estaba muy revuelto, empezó a llover de nuevo y el viento movía mucho el barco.
Nos hicieron saltar e ir nadando hasta la montaña, donde había un remolino de cuerdas por las que había que trepar hasta arriba, donde estaba el acceso a Maya Bay. Esta experiencia podía haber sido divertida de no ser por la tormenta y las olas que nos empujaban contra las rocas. Unas 30 personas enganchadas de una cuerda y gritando mientras trataban de no ahogarse. De no ser por la ayuda que recibí de algunos que estaban más fuertotes, no habría llegado a subir ni en sueños.
Apenas pudimos disfrutar de este magnífico lugar por el viento que hacía. Además tras la experiencia anterior, todos estabamos algo acojonados.
Para volver al barco se hizo todo una operación de rescate arrastrando a la gente con los kayak... Visto el tiempo, ya nos nos llevaron a ninguna otra playa, asique hicimos tiempo hasta la comida y regresamos a la isla.
A pesar de nuestra penosa experiencia, no dejaré de recomendar el tour ya que me parece una forma práctica y barata de ver todo lo que tiene Ko Phi Phi y contando con poco tiempo.
Al cabo de un rato, la lluvia había cesado, aunque seguía haciendo frío. El lugar donde nos encontrabamos en ese momento era impresionante, asique nos atrevimos a saltar al agua y empezar con las actividades de buceo y kayak antes de que nos lloviera otra vez. La experiencia fue increíble. Pese a los numerosos barcos y turistas, había miles de peces que no temían acercarse y nadar junto a ti.
Más tarde el barco nos llevó a Maya Bay, la playa donde en su momento estuvo Leonardo Di Caprio para rodar la película "La playa", además este lugar ha cogido fama por la cantidad de anuncios y spot que se han rodado en él. Aquí tampoco tuvimos suerte, ya que el mar estaba muy revuelto, empezó a llover de nuevo y el viento movía mucho el barco.
Nos hicieron saltar e ir nadando hasta la montaña, donde había un remolino de cuerdas por las que había que trepar hasta arriba, donde estaba el acceso a Maya Bay. Esta experiencia podía haber sido divertida de no ser por la tormenta y las olas que nos empujaban contra las rocas. Unas 30 personas enganchadas de una cuerda y gritando mientras trataban de no ahogarse. De no ser por la ayuda que recibí de algunos que estaban más fuertotes, no habría llegado a subir ni en sueños.
Apenas pudimos disfrutar de este magnífico lugar por el viento que hacía. Además tras la experiencia anterior, todos estabamos algo acojonados.
Para volver al barco se hizo todo una operación de rescate arrastrando a la gente con los kayak... Visto el tiempo, ya nos nos llevaron a ninguna otra playa, asique hicimos tiempo hasta la comida y regresamos a la isla.
A pesar de nuestra penosa experiencia, no dejaré de recomendar el tour ya que me parece una forma práctica y barata de ver todo lo que tiene Ko Phi Phi y contando con poco tiempo.
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